sábado, 10 de marzo de 2012

DEPORTES: Carmen Jordá disputará las GP3 Series-/ Sainz y Moya ganan el Rally de España de Históricos/ EL DIVÁN DE OLGA VIZA CON PEDRO DE LA ROSA- FORMULA-1-

TÍTULO: Carmen Jordá disputará las GP3 Series- .

CON EL EQUIPO PORTUGUÉS 'Ocean Racing Technology'.
Estoy encantada con este acuerdo, especialmente porque Ocean es un equipo experimentado en la GP2", dijo la española


  • Carmen Jordá-foto- es la segunda mujer inscrita en las GP3 Series tras la contratación de la italiana de 18 años Vicky Piria por el equipo 'Trident Racing'.







  • Carmen Jordá participará en las GP3 Series de 2012 con uno de los coches del equipo portugués 'Ocean Racing Technology'. La española, de 23 años, participó el año pasado en el Lamborghini Super Trofeo.
    Anteriormente disputó la Indy Lights con la escudería 'Andersen Racing' y la clase LMP2 de las Le Mans Series, así como en los campeonatos español y europeo de Fórmula 3. La madrileña es la segunda mujer inscrita en las GP3 Series tras la contratación de la italiana de 18 años Vicky Piria por el equipo 'Trident Racing'.
    "Estoy encantada con este acuerdo, especialmente porque Ocean es un equipo experimentado en la GP2" (categoría superior), señala Jordá en una nota de su nueva escudería.
    "Podemos trabajar bien juntos. Estoy segura de que van a ayudarme a mejorar mi rendimiento. Seré una novata en el campeonato, pero sé que voy a ir mejorando carrera a carrera", agrega Carmen Jordá.
    La española tendrá como compañero de equipo al irlandés Robert Cregan, que en 2011 participó en el las Australian V8 Dunlop series. El equipo Ocean Racing Technology, que compite en la GP2, anunció recientemente la absorción de la estructura de la escudería 'Tech 1 Racing' para la temporada de 2012.
    Carmen Jordá y Robert Cregan empezarán la pretemporada los días 12 y 13 de marzo con unos test en el Circuito de Cataluña.

    TÍTULO: Sainz y Moya ganan el Rally de España de Históricos.

    Sainz y Moya ganan el Rally de España de Históricos.

    A LOS MANDOS DE UN PORSCHE 911.
    Carlos Sainz y Luis Moya, bicampeones del mundo de rallys en 1990 y 1992 y reunidos de nuevo, esta vez en un Porsche 911, lograron hoy la victoria en el Rally de España de Históricos, que acabó en las murallas de Ávila.
    Después de dos jornadas de competición, Sainz y Moya ganaron con 46.7 segundos de ventaja sobre otro Porsche 911, el pilotado por el también español Jesús Ferreiro, que ganó la primera edición de esta carrera.
    Sainz y Moya ganaron todos los tramos del rally, a excepción del último de la primera etapa.
    "Estoy muy contento, primero porque el rally le ha salido muy bien a la organización, y segundo porque cuando decidimos correr teníamos poco que ganar y sí mucho que perder. Pero el esfuerzo ha merecido la pena, por el resultado y por haber podido ayudar a los rallys y apoyar el automovilismo", aseguró Sainz en declaraciones que difunde 'Media Racing'.
    "Quiero dar las gracias a Porsche por haberme brindado esta oportunidad y darme la posibilidad de competir con este coche, que se ha comportado muy bien, que tiene un gran potencial, y que si hay que repetir lo haremos mejor, seguro", agregó.
    Su copiloto, el gallego Luis Moya, señaló que se lo ha "pasado de maravilla". "Me han impresionado las frenadas sobre todo, y ya me gustaría que mucha gente viera dónde frenaba Carlos en las bajadas", dijo.
    "En la primera etapa lo pasé mal, porque por la noche, como ya tengo 51 años, llevaba gafas para lejos, y me costaba mirar a las notas. Pero en la segunda etapa todo ha ido mucho mejor, y yo estaría encantado de repetir... pero esporádicamente, nada de hacer un campeonato completo", agregó Moya.
    Clasificación final:
    1. C. Sainz-Moya (Porsche 911) 1h.28:12.5
    2. Ferreiro-Anido (Porsche 911) a 46.7
    3. Pedro-Giovanni (Lancia 037) a 2:56.9
    4. A. Sainz-Martínez (porsche 911) a 4:13.3
    5. Harrach-Welserheimb (Mitsubishi Lancer) a 4:39.1.

    11-3-2012-TÍTULO: EL DIVÁN DE OLGA VIZA CON PEDRO DE LA ROSA- FORMULA-1-

    EL DIVÁN DE OLGA VIZA.

    De la Rosa: "En la F1 la velocidad no se pierde con los años".

    No habrá muchas más oportunidades de verle vestido de calle porque a partir de ahora aparecerá enfundado en el mono. El próximo domingo arranca el Mundial de Fórmula 1 y esta vez él estará en la pista. Respetadísimo piloto probador, brillante comentarista de televisión, Pedro nunca engañó a nadie. Es piloto por encima de todo y ansiaba competir. Las carreras tiene un nuevo aliciente, su equipo HRT.

    PREGUNTA.La última vez que nos vimos me dijo: "Soy portero suplente y eso es lo peor".

    RESPUESTA. ¡Aquí un ex portero suplente! Ahora me podría parecer a un defensa central. Soy titular, pero tengo mucho recorrido todavía hasta meter gol. Lo que quiero ser es delantero centro. ¿Y quién no? El equipo no está todavía para jugar al ataque, aún somos amarrateguis, de poner el autobús y mantener la puerta a cero [se ríe]. Nos falta crecer para llegar a meter goles. Ésa es la realidad.
    P. ¿En la Fórmula 1 no puede haber 'cenicientas' como en la Copa del Rey?
    R. En realidad la Fórmula 1 se parece mucho a la Liga española de fútbol, es bipolar. Hay dos grandes, Ferrari y McLaren y, como yo soy de la Barça, te diría que Ferrari es el Madrid y McLaren el Barcelona.
    P. Perdone, el que manda es Red Bull.
    R. Red Bull es Renault en su época. Es uno de esos equipos que en un momento determinado pueden ganar la Liga, pero no me atrevería a decir que dentro de 20 años seguirá dominando, por el contrario, sí me atrevo a aventurar que lo seguirán haciendo los dos grandes.

    P. Pilotar, ésa era su obsesión. ¿Qué se decía a sí mismo cuando no llegaba la oportunidad?

    R. Me preguntaba qué quería seguir haciendo, ¡y tenía clarísimo que quería seguir compitiendo! Lo que no quería es levantarme por las mañanas para ir a la oficina y saber lo que iba a hacer, quería sentir el gusanillo.
    P. ¿Ha llegado a pensar que no le estaban valorando?
    R. Totalmente, pero sólo en el caso de Sauber. No quiero hacerme el interesante, pero nunca he dudado de que llegaría la oportunidad. Reconozco, y no sé qué he hecho mal, que nunca he tenido un coche decente. Es mi única asignatura pendiente y me resisto a que eso no ocurra. He trabajado con los mejores, con Fernando Alonso, que para mí es un auténtico crack, con Hamilton, Button, Räikkönen y sé que en mi vida no tengo nada que envidiarles, que lo único que no he tenido es la posibilidad de conducir un coche competitivo. Ése es mi unfinished bussiness, que dicen los ingleses. Por eso estoy aquí, porque el proyecto de HRT es único y el momento, histórico. Si dejo escapar esta oportunidad...
    "Soy de los pilotos que necesitan saber lo que llevan debajo del culo"
    P. Lo de la última oportunidad se lo he oído decir en más de una ocasión.
    R. [Cierra los labios conteniendo la frase] ¡De acuerdo, no lo diré mas! [Se ríe]. A mis 41 años tengo muchísima hambre. El otro día, Reyes, mi mujer, me dijo: "Te veo con la misma mirada que cuando debutaste con Arrows en 1999, y por eso estoy tranquila".
    Hay mucha gente que me ha criticado por tomar esta decisión al final de mi carrera. Acababa de firmar mi renovación con McLaren, era un contrato a largo plazo que probablemente aseguraba mi futuro.
    P. ¿Cómo se lo dijo a Martin Whitmarsh, el jefe de McLaren, uno de los sabios de la F1?
    R. Para mí fue el momento más emotivo. Pensaba que me iba a tirar el ordenador a la cara y llamarme desgraciado. Me resultaba muy difícil decírselo, iba dando rodeos en la conversación, él cortó y me soltó: "¿Qué me quieres decir?". Cuando le conté que me quería ir a HRT, que quería volver a competir, hubo un largo silencio, pero dijo: "Debes de estar loco, pero me encanta que mi piloto reserva esté tan loco y que sea un apasionado tan grande. Eso significa que hemos tenido al tipo adecuado".
    "HRT no está aún para jugar al ataque, somos 'amarrateguis', de poner el autobús2
    P. Un tipo al que no le ha importado dejar una escudería grande, perder dinero y situarse al final de la parrilla. ¿Nada le hizo dudar?
    R. Sí, hasta que el equipo no tomó la forma que tiene ahora había un aspecto que sí me hacía dudar. Algo que es fundamental para mí, con quién iba a trabajar. No me refiero a los mecánicos o ingenieros, si no a los dirigentes con los que tenía que tratar. Porque muchas veces firmas un contrato y de repente te encuentras trabajando con gente con la que no quieres trabajar. Aquí ha jugado un papel fundamental Luis Pérez Sala, que es un tío muy serio.
    P. Para usted, un referente.
    R. Mi héroe en los años mozos. En el circuito de Estoril, cuando él era piloto de Fórmula 1 y yo un pipiolo de Fórmula Ford, le pedí un autógrafo. Me puso: "Para Pedro, con la esperanza de que llegue a la Fórmula 1". Ese autógrafo ha estado en el corcho de mi escritorio durante más de 20 años. Ésta es una historia real, ¡y ahora Luis es mi jefe! Es muy bonito.
    P. ¿Ha cerrado el círculo?
    R. Todavía no, recuerde que aún soy defensa central. Lo cerraré cuando esté de delantero centro, y ¡bua! faltan unos años. Sí, tengo 41, ¿y qué?
    P. ¿Qué?
    R. Siempre digo en broma que Fangio ganó su primer Mundial a los 45 años, [se detiene] bueno ya sé que las cosas han cambiado. Pero mientras el cuerpo aguante y yo me lo pase bien... En este deporte los años son mentales, la velocidad no se pierde a los 40, se puede perder a los 50.
    "Mi madre ya no tomara tranquilizantes para verme, ha decidido disfrutar"
    P. ¿Tampoco la vista?
    R. ¡Es verdad que he perdido un poco, pero muy poco! Conozco a muchos pilotos que llevan gafas o lentillas para conducir. Los conocemos, los tenemos detectados [se carcajea], pero no se dicen los nombres.
    P. No parece un tema menor.
    R. Te sonará fuerte, pero en un coche de Fórmula 1 la visión no es tan importante. He experimentado mucho, he utilizado de todo buscando siempre el rendimiento máximo. Cuando estás en el monoplaza, vibra tanto todo que aunque veas muy bien, te va a vibrar la vista.

    P. Que en la parrilla haya dos tipos, Schumacher y usted, con más de 40 es memorable.

    R. Mi único secreto es haberme cuidado toda la vida. Siempre he hecho deporte, he comido sano y he dormido bien. Siempre, no hay más.
    P. No querrá que me crea que no ha roto las normas, ¿cuál fue la última vez que tomó más de una copa?
    R. Hace poco [se ríe], concretamente el 25 de febrero porque celebramos el cumpleaños tanto de mi mujer como el mío. Mi mujer cumple el 22, como Niki Lauda, y yo el 24, como Alain Prost. Rompo las normas ¡claro que sí! Pero mis amigos dicen que hago una vida de gallina. Me acuesto cuando se pone el sol y me gusta levantarme y desayunar el primero. Así soy feliz.
    P. Se subirá por primera vez al nuevo HRT el próximo viernes, en Australia, en los entrenamientos libres. Karthikeyan, su compañero, sí pudo probarlo hace unos días.
    R. Cuando se bajó le pregunté: "¿Has notado bien el coche?". Me miró, le brillaban los ojos y me dijo: "Ya va mejor que el del año pasado". Me gustó porque el feeling inicial es muy importante.
    P. Usted a los aficionados les pide paciencia
    R. Este equipo ha nacido por la afición que hay en España y la única manera de que se identifiquen con nosotros y nos respeten es ser transparentes, aún así nos van a criticar, es normal, porque no vamos a ganar. Nosotros no mentimos y la verdad es que ahora mismo somos el peor equipo de la F1, pero no queremos serlo y no lo vamos a ser a medio plazo. La ventaja es que Fernando Alonso tira del carro. La afición va estar con él y luego va a tener su corazoncito para nosotros.
    P. Puede que sea el peor equipo, pero donde mejor se va a comer.
    R. Ya lo creo, el catering es de Arzak. ¡Calidad made in Spain a tope! En HRT todo es diseño y fabricación española.
    P. Solo les falta que el mono sea de Zara.
    R. Ojalá [se carcajea]. Es que somos buenos en todo, lo único que nos diferencia son las oportunidades, porque el mercado es anglosajon y la mayoría de equipos tienen un núcleo anglosajón. Nosotros, no. Un 80% de HRT es español, empezando por nuestro jefe de ingeniería Toni Cuquerella.
    P. Usted debe ser de los que 'exprime' a los técnicos.
    R. Acierta. Reconozco que puedo ser muy pesado para un mecánico o un ingeniero. El otro día, cuando estábamos haciendo el asiento del nuevo HRT un mecánico me dijo: "Ya me han advertido que eres muy puñetitas" [se ríe].
    P. De hecho, puede que sea uno de los pilotos con más conocimientos técnicos. Ha llenado su disco duro como probador de McLaren y de Pirelli.
    R. Creo que hay dos tipos de piloto, y uno no es mejor que el otro. Sólo distintos. Hay al que no le importa qué lleva debajo del culo y aunque sea con tres ruedas dará el 100% de resultados. Yo no soy así y me gustaría, pero para ir al 100% necesito saber lo qué conduzco, saber por qué funcionan las cosas. Eso me da confianza. Eso sí, después sé cerrar el libro. Cuando bajo la visera y empieza el examen, voy a saco.
    P. Está feliz como un niño, su mujer tranquila, ¿y su madre? Se lo pregunto porque sé que tenía que medicarse para verle correr.
    R. Creo que medicarse ya no le calma más. Ha abandonado los tranquilizantes y se ha hecho el propósito de intentar disfrutar. Después de muchísimos años acepta que éste es mi trabajo y mi pasión.
    Hace unos días presentamos el equipo en Barcelona, ella no me dijo nada pero acudió y de repente ¡pam! Estaba yo junto al coche y la encontré a mi lado. Me hizo muchísima ilusión porque a lo largo de toda mi carrera mis padres habrán ido a tres grandes premios. Les daba mucho miedo, lo pasaban fatal.
    P. Pero la enfermedad se la contagió su padre.
    R. Mi padre era un apasionado brutal. Se pasaba los fines de semana debajo del coche, arreglándolo. Y eso se transmite. Yo empecé a los cuatro años con una moto hasta que probé un kart, además, yo en moto siempre he sido bastante malo comparado con mi hermano mayor o mis primos Alberto y Javier Puig. El caso es que los lunes en el colegio los dedos me olían a gasolina.
    P. ¿Sus hijas qué dicen del trabajo de su padre?
    R. Hay una frase que se oye mucho en casa cuando me ven hacer la maleta: "¿Papá, vas a ganar?". La respuesta es lo que no se oye porque realmente no voy a ganar [se ríe], pero en la cabeza de un niño sólo existe ganar o perder
    P. ¿Qué otra afición hay cuando saca la llave del contacto?
    R. Mi afición oculta es entender los mercados financieros, la crisis. Todo empezó cuando en los aviones te ofrecen prensa económica. Un día leyendo el Wall Street Journal pensé, vamos a ver, sé inglés, lo hablo bien, pero no estoy entendiendo nada de lo que pone aquí. Tío, entérate un poco, no puedes saber sólo de coches, de barras estabilizadoras y amortiguadores. Me apasioné y me apasioné también con Orbyt. Cada mañana me descargo todas las publicaciones que puedo.

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